Franklin Castro.

La ampliación de la calle en San Rafael de Paquera, generó la polémica en el sentido de hasta dónde debe llegar el respeto a la propiedad privada. La situación se dio tras la destrucción de la cerca y parte de una acera, en un lote perteneciente a la señora Urbelina Ramírez Vega, sin la autorización de esta.

“Sabemos que el camino hay que ampliarlo y no me opongo a que se mejore, pero creo que se debe respetar la propiedad privada y en mi caso, nunca solicitaron mi aprobación y muy fácilmente destruyeron la cerca y la acera”, manifestó Ramírez.

En las mejoras de los caminos vecinales, participan el Ministerio de Obras Públicas y Transportes MOPT, la Sociedad Alemana de Cooperación Técnica GTZ (por sus siglas en alemán) y el Concejo Municipal de Paquera, entre otras entidades.

Consultado sobre el caso Fernando Hidalgo Cárdenas, director regional del MOPT, dijo que la calzada tiene que estar a nueve metros mínimo, “se supone que ese el es derecho de vía”. Al preguntársele sobre quien es el responsable del rompimiento de la cerca, el funcionario dijo que el concejo está a cargo de eso.

“Ahí hay un comité de caminos, nosotros no nos metemos en ninguna parte, la comunidad y la municipalidad lo avalaron, de mi parte yo no he dado ninguna orden”, manifestó el funcionario.

Rafael Pérez Cortés, presidente del Comité de Caminos de San Rafael, dice que eso no es su responsabilidad, “el comité no se mete en eso, es el jefe del MOPT que trae las órdenes”, aseguró. Sin embargo Pérez dice que en donde se metieron es donde da la medida. “Nosotros fuimos muy claros en que la gente debía ampliar”.

Por su parte el Intendente paquereño Alcides González Ordoñez, dijo que la destrucción de la cerca y parte de la acera, no es responsabilidad del Concejo Municipal, “lo de las medidas y eso le compete al MOPT, nosotros no tenemos maquinaria, nosotros no hicimos eso”, aseguró.

Los entrevistados en cierta manera minimizaron la destrucción de la cerca, pues adujeron que era en pro del desarrollo. Sin embargo la señora Ramírez, se pregunta si harían lo mismo en el centro de Paquera, en donde la vía está muy estrecha. Está claro que para demoler aceras y edificaciones, se necesita el debido proceso.

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